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¿Por qué hay que hidratarse?
¿Por qué hay que hidratarse la piel?
La mayoría de las cremas hidratantes tienen como objetivo mejorar la epidermis, la capa más superficial de la piel; sin embargo pocos cosméticos llegan a la dermis, la capa más profunda. Pero ahora se sabe que la buena hidratación de la capa córnea (la más externa) también tiene beneficios internos.
¿A partir de qué edad deben comenzar a usarse?
Las cremas no son una cuestión de edad, sino de estado de la piel (grasa, seca, mixta, reactiva, con tendencia al acné…); en general con el paso de los años, se tiene la tendencia a tener la piel más seca y se requiere mucha más hidratación, mientras que los jóvenes tienen la piel de textura ligera y necesitan menos hidratación.
¿Los hombres necesitan productos específicos?
Existen significativas diferencias en el tipo de reclamo que se ofrece en los envases, pero esa es una cuestión de publicidad, más que de realidad. Las cremas que dejan brillo o grasa no suelen gustar a los hombres, que suelen tener más glándulas sebáceas. Es el tipo de piel lo que marca la diferencia.
La fórmula perfecta que debemos buscar.
Los principales activos son: Vitamina C antioxidante en la crema de día para neutralizar los daños de la contaminación; acido retinoico, siempre por las noches para tratar los primeros signos de envejecimiento; acido glicólico, por la mañana o la noche, que elimina las células muertas y alisan la piel; y protección solar de fac
tor 50, para luchar contra la radiación.
¿Qué debemos evitar?
Los cosméticos contienen una gran cantidad de sustancias químicas necesarias. Las que causan la mayoría de las alergias son los conservantes y fragancias; entre los conservantes con mayor riesgo de causar alergia están el “Kathon CG” y otros liberadores del formol. En cuanto a la fragancias que mayores cuadros de intolerancia causan, están el “geranio, musgo de encina, alcohol, cinámico y lyral”.
Lo que hacemos mal
Aplicar cosméticos en diferentes lugares del indicado (la crema de la cara en el contorno de ojos, por ejemplo). Dejar los envases expuestos a fuentes de calor o luz o aplicárnoslos sin habernos lavado las manos previamente. También hay que evitar usar varios cosméticos sin quitar el anterior. Esto hace que se sume la concentración de determinados compuestos químicos sobre la superficie cutánea que de forma separada no ocasionan problemas, pero que sumados superan el umbral de tolerancia cutánea.
La ciencia que hay detrás de una crema
Las firmas importantes de cosmética no lanzan una crema sin eficacia constatada. “Detrás de una crema hay ciencia”. El desarrollo de un nuevo cosmético necesita entre dos y ocho años desde que se empieza a investigar hasta que llega el punto de venta. Lo más importante de un cosmético es que pase las medidas de seguridad, que estén bien etiquetados y que contengan toda la información y el sello europeo.