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Cáncer Cutaneo: La fotoprotección desde la infancia es fundamental en su...
Estamos en primavera, se acerca el verano y es el momento para recordar algunos puntos clave en relación con la protección solar. Podemos disfrutar de muchas actividades al aire libre, con todos los beneficios que estos aportan a nuestra salud, pero intentar hacerlo minimizando los riesgos para nuestra piel.
La exposición solar excesiva e inadecuada favorece la aparición posterior de cáncer de piel también el envejecimiento prematuro de nuestra piel con manchas y arrugas. Estos efectos negativos suelen verse a largo plazo y a menudo cuando empezamos a ser consientes de ellos, el daño ya está hecho.
Muchos estudios epidemiológicos relacionan la aparición de tumores de piel con los hábitos de exposición solar que tuvimos 20 a 30 años antes.
De ahí que sea fundamental la protección solar durante la infancia y la adolescencia.
Las quemaduras solares durante la infancia y la adolescencia aumentan el riesgo de padecer durante la edad adulta melanoma (el cáncer de piel más agresivo) y carcinoma basocelular (el cáncer de piel más frecuente y menos agresivo). Por eso unos pilares básicos de la prevención de es procurar una adecuada protección solar en niños y adolescentes.
La protección solar gira sobre tres ejes:
1.Buscar la sombra cuando se pueda.
2.Ropa y gorros adecuados a las actividades que realizamos.
3.Fotoprotectores tópicos ( crema solares)
Los colegios pueden jugar un papel fundamental en cualquier estrategia de protección solar dirigida a niños y adolescentes. Por una parte informar y educar al respecto, facilitar y apoyar las iniciativas que hagan mucho más accesible la protección solar en niños y adolescentes durante los recreos y actividades escolares que se desarrollen al aire libre.
La prevención del cáncer de piel en los adultos del mañana es en buena medida una tarea actual, sobre los niños de hoy y es una misión de todos.