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¿Cómo cuidar la piel sensible?

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Estética

La piel sensible reacciona a las agresiones (frio, calor, sequedad…) y no tolera bien los cosméticos, manifestándose con enrojecimiento, desecación picor…. Esto puede ocurrir de forma permanente o cursar en forma de episodios intermitentes.

¿Cómo podemos cuidar la piel sensible?

• Es una piel que necesita más atención que cualquier otra y por eso es necesario tomar ciertas medidas a la hora de llevar a cabo su limpieza e hidratación.
• Esta piel debe limpiarse con jabones muy suaves ya que estos eliminan el manto hidrolipídico de la piel y la deja desnuda frente a las agresiones. También facilita la evaporación del agua de la piel, lo que contribuye a que se deshidrate y que se seque con facilidad.
• El dermatólogo nos dirá si estamos ante una piel sensible-seca que necesita cremas con alto contenido en grasa o si la piel es sensible-grasa que necesita más agua que grasa. Esto es fundamental para no empeorar, las cremas  que no deben de llevar ni conservantes ni perfumes.
• No existen productos inofensivos al 100 %, ni siquiera los denominados “naturales”. A veces nos sorprenderíamos al ver que cremas naturales o hipoalergicas pueden dar problemas. Si nuestra piel es sensible debemos huir de ingredientes irritantes como los ácidos glicólicos, retinoides, excipientes hidroalcohólicos y  maquillajes de mala calidad, porque no siempre lo más caro es lo mejor. También debemos pensar que lo que hoy toleramos puede que mañana no  sea así y viceversa.
• La protección del sol y de las fuentes de calor. En pieles sensibles es preferible  utilizar filtros físicos cuando nos exponemos al sol. Estos filtros son más blancos y menos cosméticos pero más seguros.
• Si tenemos una piel sensible debemos reducir o eliminar las bebidas alcohólicas, así como alimentos picantes o que contengan especias y los productos en conserva.
• Debemos evitar los lugares calientes y húmedos (como las saunas) ya que los cambios de temperatura suelen romper los capilares causando un enrojecimiento de las mejillas.
• Hay que tener cuidado con los tratamientos cosméticos, optando por técnicas poco agresivas. Los peeling no suelen ser recomendados, como tampoco las cremas exfoliantes.
• Estas pieles hay que hidratarlas abundantemente con cremas con alto contenido en grasa que ayuden a reconstituir el manto hidrolipidico y con formulas hipoalergénicas, es decir con pocos ingredientes.