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El cuidado de las uñas ha preocupado a la humanidad desde tiempos remotos, ya que las uñas constituyen una carta de presentación. De ahí el interés por mantener una estética adecuada en  hombres y mujeres.

Los hongos de las uñas u onicomicosis son una alteración muy frecuente que vemos en nuestra consulta. Las onicomicosis se definen como la infección por hongos de una o varias uñas que provoca como consecuencia la alteración en el color de su superficie, engrosamiento o, en otras ocasiones, inflamación de la matríz ungueal.  Actualmente,  sabemos que afecta al 5% de la población general, constituyendo cerca del 30 % de las infecciones micóticas.

En la mayor parte de los casos, los pacientes no tienen un diagnóstico preciso, o bien no están correctamente tratados.

CONSEJOS PARA SU DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO:

• Es imprescindible hacer un examen directo con cultivo para la demostración del agente etiológico. Los resultados pueden tardar hasta 45 días.
• Los hongos de las uñas también pueden afectar a la piel, sobre todo en los pies.
• Hay que evitar la humedad ya que los ambientes húmedos como gimnasios y piscinas son los más propicios para adquirir la infección.
• De no tratarse adecuadamente la infección se convertirá en progresiva, pudiéndose extender a otras zonas. De ahí la importancia del tratamiento precoz.
• Los tratamientos  tópicos en forma de lacas o cremas son lentos y pueden requerir hasta un  año de aplicación.
• Los tratamientos orales son más eficaces y suelen requerir menos tiempo de tratamiento (entre 3 o 4 meses).
• Una alternativa terapéutica es el láser pulsado de Neodimio-Yag pero su eficacia no está aún adecuadamente contrastada.
• La simple avulsión de la uña da lugar a la reproducción de la patología.
• Hay que hacer el diagnóstico diferencial con otras enfermedades de la piel que también producen  alteraciones ungueales como la psoriasis, el liquen plano u otras.